ACERCA DE LA CONVOCATORIA DEL SOBERANO GRAN COMENDADOR DEL SUPREMO
CONSEJO DEL GRADO 33º A LOS MASONES CUBANOS RESIDENTES EN EL EXTERIOR.
Muy Respetable Gran Maestro de la
Gran Logia de Cuba de A.L. y A.M.:
Venerables Hermanos
Representantes:
La Comisión Permanente de
Relaciones Exteriores de la Gran Logia de Cuba ha solicitado al Muy Respetable
Gran Maestro su venia para exponer ante ustedes este Informe Especial, referido
a un acontecimiento cercano que puede ser (siempre que lo afrontemos con la
inteligencia y el valor requeridos) un importante hito en la historia de la
Masonería Cubana y Latinoamericana.
Nos referimos al diferendo
extendido por más de 50 años entre los masones que viven y trabajan en la
República de Cuba, bajo la Jurisdicción de la Gran Logia de Cuba de A.L. y
A.M., y aquellos hermanos que –en diferentes épocas y bajo diversas
circunstancias- abandonaron el territorio nacional para ir a residir en otros
países, llevando con ellos como su más preciado bien la condición de Masones
Cubanos, la cual han luchado por hacer prevalecer en otras tierras.
Muchas han sido las adversidades
que han afrontado; desde aquellas de carácter económico que les impedía
ingresar en Logias regulares que exigen una alta erogación monetaria a sus
miembros; hasta otras mucho más incomprensibles para todos nosotros,
relacionadas con el color de su piel o su procedencia “latina”.
En aquellos territorios con mayor
concentración de hermanos masones –especialmente La Florida y New Jersey,
E.U.A.- , muchos de ellos decidieron crear formaciones masónicas, que hasta el
día de hoy no han obtenido reconocimiento alguno (tanto por las Potencias Masónicas
de los territorios donde trabajan como por la Gran Logia de Cuba), partiendo
siempre del hecho de que su creación no cumple con los requisitos
universalmente reconocidos para definir la regularidad de un cuerpo masónico.
Todos nosotros, sin excepción, hemos caído en la terrible tentación de
estigmatizar a nuestros hermanos con el rótulo de “irregulares” y, partiendo de
este principio y de la defensa de nuestra Regularidad universalmente
reconocida, le hemos vuelto la espalda a aquellos que un día compartieron vida,
sueños, alegrías y tristezas con nosotros.
En el Informe de la Comisión de
Relaciones Exteriores acerca de este tema, elaborado a solicitud de nuestro Muy
Respetable Gran Maestro, Ilustre Hermano Evaristo Rubén Gutiérrez Torres, y que
fuera circulado debidamente a todas las Logias constituyentes de la Gran Logia
de Cuba, se expresa como primera conclusión:
“1.- Toda la información
analizada hasta el momento indica que, tanto las Logias particulares como la
Gran Logia de Cuba de A.L. y A.M. (en el Exterior) son en estos momentos
formaciones masónicas IRREGULARES tomando en consideración los estándares
contemporáneos para la definición de la regularidad masónica. No obstante,
también concluimos que muchos de los masones que pertenecen a estas formaciones
fueron regulares de origen, en tanto vieron la luz en Logias regularmente
constituidas y pertenecientes a la Gran Logia de Cuba de A.L. y A.M.”
Y en su tercera conclusión
señala:
“3.- El momento actual y la
historia que lo antecede obliga hoy a la Gran Logia de Cuba de A.L. y A.M. a la
búsqueda de una solución colegiada del conflicto existente entre los masones
que trabajan en las Logias de nuestra jurisdicción y aquellos hermanos que
viven y trabajan masónicamente en territorio de la Gran Jurisdicción de la
Florida.”
Como se puede apreciar el
contenido y espíritu de estas conclusiones responde al momento en que
realizamos el estudio y a la información que en aquella fecha (agosto del año
2012) pudimos consultar a tales efectos.
Hoy podemos decir, a la luz de
nueva información y de nuevos documentos que han llegado a nuestro
conocimiento, como el “Código Masónico
Cubano” de la Gran Logia de Cuba (en el Exterior), que nos encontramos más
ante un fenómeno de RECONOCIMIENTO
que ante un problema de REGULARIDAD.
El mencionado Código Masónico
expresa de modo indudable los más claros principios de la Regularidad Masónica,
recogidos en los Antiguos Límites de la Fraternidad, así como en todos aquellos
elementos que hoy nos sirven para afirmar que una Potencia Masónica cumple con
los estándares de regularidad, como puede ser la creencia en un Ser Supremo, la
presencia del Libro de la Ley Sagrada en todos sus trabajos, la exclusividad
masculina de sus miembros o la prohibición expresa de todo debate acerca de
política o religión en sus tenidas.
No obstante, presenta también
algunos puntos susceptibles a debate, como lo es el Título II del Libro I,
donde bajo el rótulo “Regularidad de Origen”se expresa:
“Art. 2 La Gran Logia de Cuba de A.L. y A.M. (en el exterior)
procede del territorio que está bajo la soberanía de la República de Cuba,
trabajando con su regularidad de origen, en el exterior de su territorio
geográfico.
Art. 3. La Gran Logia de Cuba de
A.L. y A.M. (en el exterior) se fundó por masones con regularidad de origen,
integrantes de Logias constituyentes de una Gran Logia regular y universalmente
reconocida, que estableció un principio de Derecho Masónico: la existencia de
su soberanía geográfica en el exterior de su territorio jurisdiccional.”
Podemos observar que en el
Artículo 3 se mal interpreta el principio de la Territorialidad, ya que la
Constitución de nuestra Gran Logia de Cuba de A.L y A.M. reconoce en su
Artículo 3: “El territorio sobre el cual tiene jurisdicción la Gran Logia de Cuba de
A. L. y A. M., es el mismo que está bajo la soberanía nacional de la
República.”, refutándose así la particular interpretación de que puede
existir –de acuerdo a nuestra leyes actuales- un Cuerpo Masónico en otro
territorio que no sea el de la República de Cuba. Investigado este principio en
las legislaciones anteriores (en el supuesto de que fuese considerado por los
legisladores un antecedente histórico del mismo), hemos comprobado que desde la
Constitución que fuera aprobada por la Alta Cámara en 1892 –pasando por las de
1921, 1924, 1947 y 1961- siempre ha sido refrendado el principio de
Jurisdicción SOBRE EL TERRITORIO DE LA
ISLA (en las dos primeras) O LA
REPÚBLICA DE CUBA.
No obstante, y con independencia
de puntos polémicos que pueda presentar, el Código Masónico de la Gran Logia de
Cuba de A.L. y A.M. (en el Exterior) expresa claramente que esta formación
cumple con la mayoría de los parámetros requeridos para ser considerara un
Cuerpo Regular, con la sola excepción del origen de la misma, el cual no estuvo
avalado por ninguna Gran Potencia Regular, sino solamente por la voluntad
personal e individual de Grandes Maestros de la Gran Logia de Cuba que lo
decidieron y perpetuaron.
Como ya expresamos en nuestro
Informe de agosto del 2012: “Las acciones emprendidas por varios Grandes
Maestros durante los años 60 y hasta los 80 del siglo XX, fueron evidentemente
encaminadas a tener listas las alternativas para salvar a la Gran Logia de Cuba
y la Masonería cubana de una eventual clausura de la misma por el Gobierno
cubano, por tanto dichas acciones deben ser evaluadas siempre desde el prisma
de las condiciones histórico-concretas que las originaron” y por tanto
hoy, bajo muy diversas condiciones y circunstancias históricas, resulta
inconsecuente e incongruente mantener antiguos discursos y obsoletas posiciones
sectarias.
Venerables Hermanos:
El Soberano Gran Comendador del
Supremo Consejo del Grado 33º del R.E.A.A. para la República de Cuba, Ilustre y
Poderoso Hermano Lázaro Faustino Cuesta Valdés, publicó en meses pasados una
cordial invitación a todos los masones cubanos que viven hoy en el exterior,
para un encuentro en La Habana, bajo los auspicios del Supremo Consejo, para
crear un espacio de diálogo que permita comenzar a dar los pasos en pos de
encontrar una solución definitiva a una brecha que nos ha mantenido separados
por más de 50 años.
Esta loable iniciativa, que infortunadamente
no fuera propuesta por este Parlamento durante todo el tiempo en que el tema de
los masones cubanos en el exterior (y muy especialmente en territorio de La
Florida) se señaló como vital y prioritario para la Gran Logia de Cuba y para
todos los masones cubanos, requiere hoy de una acogida por parte de este Alto
Cuerpo y nos obliga a tomar decisiones y preparar respuestas a los nuevos retos
que se nos avecinan.
Es imprescindible dejar
claramente sentado que este encuentro NO
VIOLA NUESTROS JURAMENTOS Y LEYES, ya que nos reuniremos en un espacio NO MASÓNICO de diálogo con aquellos
hermanos masones cubanos que hoy residen fuera del
territorio nacional. No se trata de una Tenida de ninguna índole, sino de un
encuentro informal para el diálogo. Recordemos todos que lo expresamente
prohibido por nuestros juramentos y leyes es compartir espacios masónicos y
Tenidas con masones irregulares o pertenecientes a Potencias Extranjeras que no
se encuentren en relación de amistad con la Gran Logia de Cuba, lo cual no
restringe nuestra capacidad de diálogo e intercambio, fuera de Logia, con
Hermanos de cualquier procedencia, aspecto que hemos aclarado en nuestra
condición de Presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores en más de una
oportunidad.
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Al presentar las proyecciones de
trabajo para el año 2011 de la Comisión Permanente de Relaciones Exteriores, en
el Informe Anual 2010, expresábamos a esta Alta Cámara: “De la misma forma continuaremos
trabajando en el logro de un Tratado entre la Gran Logia de Cuba y la Gran
Logia de La Florida, a fin de encontrar solución de regularización para los
masones cubanos, …. Esta gestión la comenzamos a principio del año 2010, pero
por circunstancias adversas no hemos podido avanzar en las negociaciones.”
Por otra parte, en el Informe
Anual 2012, al explicar a este Alto Cuerpo lo relacionado con el debate
suscitado acerca del tema de los masones cubanos radicados en territorio de la
Florida y el Informe de la Comisión de Relaciones Exteriores al respecto,
consignábamos:
“…estas agrupaciones de masones
cubanos están dando pasos firmes en la búsqueda de soluciones encaminadas a legitimar
su situación y a propiciar su participación en todas aquellas actividades
continentales en las cuales la Gran Logia de Cuba no puede hacerlo por la
situación económica que todos conocemos. Dar las espaldas a esta realidad será
bajarnos conscientemente del carro de la historia para verlo continuar sin
nosotros en su inexorable avance.
Consideramos que esta debe ser
una de las líneas de trabajo prioritarias en el área de las Relaciones
Exteriores de la Gran Logia de Cuba, especialmente en las nuevas condiciones
que pueda plantear el cambio de Gran Maestro en la Gran Logia de la Florida,
pues tenemos fundadas esperanzas en que el Gran Maestro que asuma la dirección
para este año 2013 tenga mayor interés en colaborar para la solución de este
problema que ya tiene más de medio siglo de existencia.”
Como se puede apreciar, el
reclamo por una solución a esta situación conflictiva no es algo reciente, sino
muy por el contrario, algo que late fuertemente en nuestras mentes y en
nuestros corazones desde hace varios años.
Hoy, el Soberano Gran Comendador
del Supremo consejo del Grado 33º ha puesto en nuestras manos una inestimable
herramienta de trabajo, reforzada por las relaciones y vínculos establecidos en
su reciente viaje a los Estados Unidos de Norteamérica, y muy especialmente por
los encuentros sostenidos con el Muy Respetable Gran Maestro de la Gran Logia
de La Florida y con diversos hermanos cubanos interesados también en encontrar
soluciones a nuestros problemas.
La Historia no nos perdonará si
dejamos pasar esta magnífica oportunidad y no afrontamos con la inteligencia y
la valentía necesaria el reto que nos imponen nuevos tiempos y nuevas
perspectivas.
Por ello la Comisión Permanente
de Relaciones Exteriores propone a la Alta Cámara Masónica la aprobación de los
siguientes ACUERDOS:
PRIMERO: Facultar al Muy Respetable Gran Maestro, Ilustre Hermano
Evaristo Rubén Gutiérrez Torres, para asistir al encuentro con los masones
cubanos que residen en el exterior, convocado por el Soberano Gran Comendador del
Supremo Consejo del Grado 33º, Ilustre y Poderoso Hermano Lázaro Faustino
Cuesta Valdés.
SEGUNDO: Otorgar un voto de confianza al Muy Respetable Gran
Maestro para que designe, mediante Decreto, la Comisión Especial que le
acompañará en dicho encuentro, conformada por Maestros Masones de la
Jurisdicción que se encuentren en posesión de los conocimientos y estudios
suficientes acerca del tema a debate.
TERCERO: Encomendar a la Comisión Especial designada a participar
en el encuentro con los masones cubanos que residen en el exterior, la
elaboración de un informe con la síntesis de los aspectos debatidos y las
propuestas de solución a los mismos, para ser presentada en la Sesión Anual 2014
de esta Alta Cámara.
Venerables Hermanos
Representantes:
Hoy los masones cubanos dispersos
en el mundo nos instan a tenderles los brazos para cerrar la Cadena de Unión
tan largamente rota. ¡ABRID VUESTROS CORAZONES A ESTE FRATERNAL RUEGO!.
En La Habana, a los 22 días del
mes de septiembre del 2013 (E.V.)
Raimundo Gómez Cervantes
Presidente de la Comisión
Permanente de Relaciones Exteriores.
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