Por :Maria Teresa Valverde Trujillo
En la Historia de Cuba asoma su nombre como genio organizador y estratega militar.
Nació en Baní, pequeño
pueblo en la provincia de Peravia en Santo Domingo, hoy República Dominicana el
18 de noviembre de 1836. En 1855, cuando aún era casi un adolescente, respondió
al llamado de su patria, que era invadida por los ejércitos haitianos de Faustine
Soulouque a mediados del siglo XIX, participando bravíamente en los combates
hasta lograrse la victoria. Cuando las tropas españolas fueron derrotadas en
1865 Gómez se trasladó a Cuba con su familia, donde se estableció.
Al conocer del alzamiento de
Carlos Manuel de Céspedes en 1868 se incorporó a las huestes mambisas. Se
desempeñó en el departamento de Oriente; llegó al grado de Mayor General del
Ejército. Al morir el Mayor General Ignacio Agramonte fue llamado por el
Secretario de Guerra de la República
de Cuba en Armas para tomar a su mando las tropas de Camagüey. Allí
tomó la extraordinaria y temible caballería mambisa que legara Agramonte,
reforzando la disciplina de la infantería. Tuvo bajo su mando al soldado Henry
Reeve -que luego llegaría a Brigadier General-, el joven oficial norteamericano
conocido entre los patriotas cubanos como "El Inglesito" y murió en
Matanzas a los 27 años de edad después de haber luchado en mas de trescientas
batallas.
Finaliza la Guerra de los
Diez Años con
el Pacto del Zanjón.
Gómez no aceptó ningún
ofrecimientos de Arsenio Martinez Campos quien siempre le trató con respeto a
pesar de que el militar dominicano se negara a legalizar con su firma el
documento con el cual quedaba cerrada la epopeya de la Guerra Grande; …y se
retira de Cuba hacia la isla de Jamaica.
Cuba después sufre otra derrota con la Guerra Chiquita, hasta que aparece el momento de encausar a los
mambises en un ejercito formal, para contribuir a realizar la guerra justa y necesaria que apuntaba y organizaba José
Martí desde Estados Unidos y que estalló en distintos pueblos en la isla de
Cuba el 24 de febrero de 1895.
Pasando José Martí por
Montecristi, República Dominicana, Maximo Gómez firma junto a él, el histórico
"Manifiesto de Montecristi",
documento en el cual dejaban expresar su ideología de independencia y de que la
naciente guerra no era contra los
españoles, sino contra las autoridades coloniales de España en Cuba. Desembarcan
juntos por la parte sur de la costa oriental; con gran infortunio muere Jose
Martí en combate; pero continúa Gómez junto a los Maceo y un puñado de
valientes mambises haciendo realidad los planes trazados por el Apóstol, hasta
lograr que, contienda tras contienda, ocasionan a España perder el dominio
sobre su ultima colonia en América. La metrópoli había sido derrotada. Alrededor
de 38,00 mambises habían luchado contra una técnica militar española de casi un
cuarto de millón de soldados.
Al establecerse la Asamble del Cerro como Gobierno provisional, Gómez entro a formar parte de ella, pero se negó a presidirla por su calidad de extranjero, al igual que por esa misma razón se negó a se candidato a la presidencia en 1902.
Fuerzas cubanas acompañan al general a su entrada en barrio del cerro. 24 febrero, 1902
Imagen dedicada a su esposa manana
Retirado a vivir en las afueras de la capital habanera y sin fortuna
personal,se dice que hacia un habitual paseo matinal por un largo terraplén desde
la Quinta de los Molinos, hasta la calle Infanta y la Avenida Carlos
III.
Partía el cortejo fúnebre mientras 21 cañonazos estremecían la Habana
En La Habana el
sábado 17 de junio de 1905, a las seis y cuarto de la tarde, el Dr José pereda Galvez anunciaba, que el generalísimo había fallecido,a la edad de 68 años, víctima de una septicemia.
Monumento a Gómez en la habana
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