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Como en varios países latinoamericanos y algunos europeos, su historia no se puede escribir si se excluye la influencia de la masonería en su cultura ni en su quehacer político y social. Nos referimos específicamente a la participación y contribución de los masones en los acontecimientos previos y los que se desarrollaron para la aprobación de la Constitución Española el 19 de marzo de 1812, conocida popularmente como “ La Pepa ” al haberse aprobado el día de San José.,Día del Padre.
Hay dos elementos que se deben destacar entre los que influyeron en los hombres que formaron las Cortes, integradas por diputados de todas las provincias de España y algunos de las colonias, como fue la circunstancia de que la península Ibérica estuviera invadida por las tropas francesas de Napoleón, quien, curiosamente, impulsó una Carta Magna para España en Bayona (1809), cuyo texto destaca por sus ideas liberales.
Según el parecer de algunos historiadores, la Constitución de Bayona encendió la llama del patriotismo y las ideas más liberales de la época influidos por la revolución francesa de 1791 y los logros de la Declaración de los Derechos del Hombre y el Ciudadano. Este patriotismo, y la necesidad de expulsar al invasor francés y los deseos contrarios al absolutismo monárquico que representaba Fernando VII, influyeron a posteriori en los españoles y especialmente entre los habitantes de la ciudad de Cádiz.
Un hecho acaecido en 1810 prendió la mecha de la pólvora al decretarse la Libertad de Imprenta. Un paso de gigante ya que permitía expresarse libremente sobre la difícil y complicada situación que vivía en aquellos momentos España.
Esto dio paso a una oleada de periodistas que empezaron a publicar todo tipo de periódicos y folletos que, generalmente, se fraguaban en cafés y tertulias.
Los periódicos con ideas liberales fueron El Robespierre español y El Semanario Patriótico. Así en estas circunstancias con el país invadido, y bajo fuego enemigo, los habitantes de Cádiz y los diputados a Cortes aprueban la primera Constitución española.
Antecedentes: como hemos visto en primer lugar, la Constitución de Bayona, novedosa para los españoles pero impuesta por el invasor napoleónico, no agradaba a muchos patriotas españoles. Despojado el rey de su corona, era el momento propicio para tomar el camino del constitucionalismo. Con esta idea se crean las primeras Juntas Provinciales que dan paso a una Junta Central que sesionó en Aranjuez , en septiembre de 1808 y formada por 35 miembros, dirigidos por el masón José Moñigo y Redondo (1728-1812) Conde de Florida Blanca. Este Junta Central comisionó a varias hombres a estudiar la situación actual de los documentos políticos y decidir el futuro constitucional de España.
Ahí se destacaron Gaspar Melchor de Jovellanos (1744-1811), Agustín Argüelles Álvarez (1776-1844 quien es considerado el Padre del Constitucionalismo español) y José Blanco White(1714-1841) entre otros masones.
Jovellanos era seguidor de la influencia conservadora anglosajona y Arguülles de la tradición del REAA:. Más liberal y al estilo francés. No obstante, los debates, muchos de ellos acalorados, lograron que el liberalismo y el constitucionalismo triunfara dotando a esta nueva Constitución de ideas liberales y masónicas, como lo marcan las cuatro tendencias del magno documento:
- Soberanía nacional: art. 2, 3 y 104.
- Garantías jurídicas ciudadanas: art. 172 y 247
- Limitar el absolutismo y más poder para las Cortes: art. 15, 149 y 168
- Ciudadanía y Patriotismo: art. 6, 13 y 25
Todas las ideas liberales de la época posterior a la independencia de la trece colonias de norte América y de la revolución francesa se vieron plasmadas en esta primera Constitución donde además aportaron ideas otros masones como José M. Queipo de Llano, Conde de Tereno (1786-18435) y Vicente Morales Duárez( diputado peruano1757-1812). Todos ellos añadieron su granito de arena para eliminar de una vez por todas el pesado lastre de la Inquisición , una institución religiosa que limitaba las principales libertades civiles que clamaba la Constitución y que por fin sería eliminada meses en 1813.
Cuando el ejército napoleónico abandonaran España y se restablece a Fernando VII como rey, su absolutismo traicionaría a los ciudadanos y a los patriotas que lucharon por la independencia y expulsaron al invasor.
El rey felón, como sería conocido, se apresuró a suspender la Constitución y los logros y libertades que en ella se había depositado con tanto sacrificio.
Años más tarde, viejos y nuevos liberales retoman el camino y se suceden una serie de acontecimientos entre los que destaca la figura del masón Rafael de Riego y Núñez (1784-1823) y el llamado Trienio Liberal de 1820-23.
El siglo XIX en España, la historia con sus aciertos y desaciertos, no se puede escribir y recordar sin mencionar a los masones que dejaron su huella imperecedera en sus más trascendentales acontecimientos.
"Viva la Pepa",Óleo de Salvador Viniegra 1912
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